viernes, enero 27, 2006

La asunción de Evo Morales: Transmisión de mando

Decidimos, después de una semana en la Isla del Sol, volver a La Paz (cuarta vez que la visité en el viaje) para presenciar la asunción "del Evo".
Llegamos el viernes 20 al anochecer. La Paz estaba sobrepoblada de visitantes. Después de conseguir, con mucha suerte, una pieza a 5 cuadras de la plaza Murillo (centro de la ciudad), salimos a buscar algo para comer caminando la avenida Armentia.
En el puesto callejero de una chola nos paramos a cenar un par de sandwiches de huevo (y van...)...
En plena cena de "dorapa" llegan dos hombres, uno de traje completo, el otro a medio trajear. Luego de algún palabrerío gracioso entre los dos hombres, la chola y nosotros, comenzó la charla política. El hombre de traje era el jefe de protocolo de Evo Morales, y el otro, el tercer hombre del MAS. Se dió una charla tipicamente latinoaméricana. Las diferencias entre los distintos pueblos de América, el boliviano, el argentino, los pueblos originarios y demás.
A la media hora, el jefe de protocolo saca una Land Cruiser del garaje y el hombre del MAS nos invita a La cueva de Magulla, un bar típico que abre los viernes por la noche.
Nos subimos al Jeep, "el que llevo a Evo de campaña por todo Bolivia", según palabras del "Masista" (casi un Marxista, se puede decir). Llegamos al bar y continuo la charla entre cervezas. De otra mesas llegaban Paceñas (cerveza boliviana) invitando al Masista, al jefe de protocolo y a nosotros.
Un gordito bizarro animaba la velada desde el escenario, salido de una pelicula de Almodovar o de Salvador Valverde. Cantaba canciones de Sandro y Los Iracundos, y por ser yo argentino pretendía que se las cante a todo el bar. Me negué rotundamente en cada oportunidad que me ofreció el micrófono para el deleite de la concurrencia.
En fin, la charla siguio hasta las dos de la mañana. El hombre del MAS (apodado Lucifer, se habran dado cuenta que olvide su nombre), es dueño del restaurante El Arriero, donde, segun dice, hay carne Argentina y demas comidas tipicas del norte nuestro. Nos dio el telefono, nos invito para ir a comer durante la semana. Tambien recolectamos el celular del jefe de protocolo, gerente de la cadena de television mas grande de Bolivia.
Nunca los llamamos.
El sabado 21 comenzo el exodo hacia Tiwanaku. A las 11 de la mañana comenzaba el acto indigena de coronacion del Evo, como hijo predilecto de la cultura Tiwanacota. El pasaje aumento a 50 bolivianos ida y vuelta (35 mas que un dia normal). Lo vimos por television desde el hostal. Evo fue coronado, y vestido con un traje tipico y ancestral. Pueblos originarios de América y el mundo le llevaron regalos de sus culturas. Luego el acto, al que concurrieron unas 3000o personas, continuaria en el pueblo de Tihuanaco, al costado de las ruinas, pero Evo y Alvaro, el matemático vicepresidente, nunca llegaron por la multitud. La fiesta siguio entre bailes tipicos, y la merienda de la torta de quinua para 10000 personas que se preparo especialmente para la ocasión.
El domingo le tocaba el turno a La Paz. Los demás presidentes invitados y el mismo Evo Morales llegarian al Congreso Nacional para concurrir al traspaso oficial del mando. La plaza estaba repleta desde temprano. La alegria y la esperanza se hacia notar en cada boliviano. Llegaron de todas las provincias para este día festivo. Por primera vez en la historia de Bolivia (con una poblacion indigena de mas del 60%. Los dos pueblos mas numerosos son el quechua y el aymara, pero existen 33 pueblos originarios en el país) el presidente seria indigena. Evo Morales es Aymara, nacido en el departamento de Oruro, famoso por sus carnavales, al sur de la ciudad de La Paz.
Las calles estaban repletas de banderas bolivianas, wiphalas y paceñas. La fiesta seguiría en la plaza de los héroes, frente a la iglesia de San Francisco. Miles de personas aguardaban al presidente electo y a los grupos musicales convocados para la fiesta. Un mar de gente miraba fijo hacia el escenario, en la calle, en las ventanas y balcones, subidos a las rejas y a los canteros, todo Bolivia y América expetante por el día histórico. Hubo folklore, discursos, Inti Illimani de Chile, Vicente Feliú de Cuba, palabras de Alvaro y de Evo y luego la lluvia torrencial que lleno de pesos a los vende-ponchos y alejo un poco a la multitud del festejo.
Era anochecer de un domingo de verano, y Bolivia tenía nuevo presidente. Algunos se fueron a dormir en paz, otros siguieron la fiesta en las calles.
Veremos como sigue la historia.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario